Hoy en día, ya se trate de pymes o de grandes multinacionales, las videoconferencias u otras herramientas colaborativas son esenciales para su funcionamiento diario. Sobre todo en la situación en la que ahora nos encontramos donde mucha gente está teletrabajando.
Es por eso, que es relevante otorgar la suficiente seguridad a este tipo de tecnologías y proteger las redes ante las posibles amenazas para minimizar los riesgos ante ataques externos o interrupciones de conectividad y poder así disfrutar de los beneficios asociados a estas herramientas de colaboración sin tenernos que preocupar.
Estableciendo unas pautas sencillas, basadas en el sentido común, podemos proteger a nuestra organización:
Comunícate sólo con usuarios conocidos
Sabemos que puede parecer obvio, pero es importante que no se de acceso a nuestra red a usuarios que no tengamos en nuestra lista de contactos. Si tenemos que contactar con un nuevo cliente, será necesario verificar su identidad para permitir su acceso.
Selecciona sólo la información esencial para compartir
Es importante seleccionar qué información necesitaremos compartir en la videoconferencia para evitar compartir el escritorio o buscar en carpetas pudiendo mostrar documentos confidenciales que nada tienen que ver con lo que se trata en la conferencia.
Mantén el software actualizado
Asegúrate que el programa de videoconferencia que utilices esté actualizado para evitar problemas indeseados, ya que se han detectado vulnerabilidades con aplicaciones de videoconferencia, como pasó con Skype el año 2018.
Guarda la información recopilada de forma segura
El intercambio de información inmediata es una de las ventajas de las conferencias y reuniones online, normalmente la recopilación de dicha información se realiza en la nube para que pueda ser compartida, por eso, cifrar este tipo de datos será fundamental para preservar su confidencialidad.
Conéctate desde una conexión fiable
Las tecnologías colaborativas dependen de la conexión a Internet. Esta conexión deberá ser constante y confiable. Conectarse desde una red conocida y segura es importante, así como contar con un antivirus o cortafuegos.
Por lo tanto, es importante evitar realizar videoconferencias desde fuera de la oficina o si la realizamos desde casa comprobar los requerimientos para realizarla de forma segura (con una red VPN o usando una WiFi cifrada).